San Juan de la Maguana, Rep. Dom.
Por Héctor Solís
En un hecho lamentable la noche de este domingo, dos vehículos sufrieron un horrible accidente en la altura del kilómetro seis de la carretera San Juan de la Maguana – Sabana Alta, alrededor de las 9:20 minutos, en el cual perdieron la vida dos jóvenes e igual fue el número de heridos.
Los fallecidos en el citado accidente fueron identificados como Roddy Antonio Cabrera de unos 26 años de edad, era empleado del banco de Reservas y se desempeñaba como cajero en la sucursal del municipio de Juan de Herrera hasta su muerte, El otro respondía al nombre de Roberto Andrés Alcántara Ramón de 29 años de edad, residente o el área de pernoctación era la calle colón esquina Domingo Rodríguez, hijo del popular Menguao.
Entre los heridos se encuentran dos mujeres jóvenes que acompañaban a los occisos, sufriendo una de éstas golpes en el pecho y la otra con una rotura del fémur y laceraciones en la rodilla, hasta el momento los nombres no pudieron ser suministrados a este medio.
El suceso conforme narran algunos amigos de los fallecidos, citan que los vehículos el carro Lexus Altezza de color blanca el cual conducía Roddy y otro del mismo color tipo hatchback que lo pilotaba Roberto, en gran velocidad de este a oeste ambos, rozaron con un impacto y perdieron el control estrellándose con árboles y desprendiendo piezas de los mismos que fueron recogidas por la autoridad metropolitana de transporte hasta a 50 metros de distancia del lugar de la colisión, de igual manera uno de los vehículo desprendió el motor.
Conforme personal de la clínica privada a la cual fueron llevados los involucrados en el hecho, afirman que llegaron sin vida por la gravedad de los golpes recibidos.
Tras indagación de lo sucedido manifestaron algunos de los compañero que habían compartido minutos antes con los fallecidos, dicen que uno retornaba de las patronales del distrito municipal de Guanito y otro iba rumbo a ese lugar, en el cual se estuvo efectuando un car show (exhibición de vehículos Tuneados).
Fue muy notoria la inmensa cantidad de personas que se dieron cita al frente del centro de salud privado para interesarse de lo que había sucedido, de igual manera mucho pesar y llantos de familiares, amigos y conocidos de los hoy difuntos.
La Policía Nacional estuvo resguardando el lugar por el tumulto, también hubo la presencia de un agente de la Amet, que fue a notificar a la institución el suceso.