El 24 de marzo del 2017, le cambió la vida a Kennedy Junior Jáquez luego de resultar ser el afortunado del sorteo de 23 millones de pesos de la Lotería Electrónica Internacional Dominicana (Leidsa), cuya suma de dinero perdió en menos de cuatro años.
El hombre relató que ese día previo a ganarse el premio, salió temprano a hacer un trabajo junto a un primo y terminó a la 1:00 de la tarde, pero quedó en volver para buscar el dinero que se había ganado tras pulir un vehículo.
Horas después de ir a retirar la remuneración del trabajo que realizó, se dirigió a comprar un ticket de la lotería como acostumbraba a hacer “religiosamente” todos los miércoles y sábados durante cinco años.
Posteriormente, acudió a la banca a adquirir otro boleto de la lotería que le había mandado a comprar un tío y en ese trayecto fue al supermercado, compró un vino y se juntó con unos amigos para compartir.
“Estaba reunido con mis vecinos cuando de repente me dice uno de ellos: 'no jugué el loto' y yo con mucha seguridad le dije, no la juegues que ese dinero es mío”, narró Junior Jáquez al ser entrevistado por el periodista Lisandro Torres a través de la plataforma de Youtube.
Después de un buen rato, un amigo de Kennedy buscó el resultado de los números ganadores y comienza a cantárselos, mientras él iba confrontando cada uno con su ticket y rectificó sin comentarle a nadie de las personas con que estaba reunido que era el “feliz ganador” y se fue para su casa.
De los 23 millones que ganó Jáquez, la lotería le entregó la suma de 17,250,000, por los impuestos que incluye el premio. De esta cantidad, guardó 16,000,000 de pesos en el banco y se quedó con el resto.
Tras resultar ganador de la cuantiosa suma de dinero, todo indicaba que la fidelidad que tenía Jáquez hacia los sorteos desaparecería; todo lo contrario. Junior Jáquez continuó jugando fuertes sumas de dinero en sorteos diarios de la lotería y en muchas de las apuestas resultaba ganador, y según expresó derrochaba todo ese dinero hasta llegar al punto de ir al banco a retirar parte del efectivo que tenía guardado.
Kennedy Junior Jáquez declaró que también gastó mucho dinero en fiestas, hasta 3,000,000 de pesos en una noche. Así como en costosos regalos que obsequió a amigos y familiares. Regaló más de cuatro vehículos valorados entre 150,000 pesos y 300,000 pesos, aparte del dinero que dio en efectivo, agregó.
La acelerada vida que llevaba lo distanció de su familia, ya que pasaba hasta cinco días fuera de su residencia, andando de fiesta en fiesta.
Cuatro años después, Junior Jáquez dijo que no tiene nada de dinero. Sin embargo, aseguró que esta experiencia le dejó una gran lección que hoy comparte a modo de aprendizaje para concientizar a otras personas.
“Muchos de esos amigos con los que yo andaba en aquel tiempo, me han dado la espalda. Mi mamá siempre me lo decía, tú no tienes amigos, te buscan por lo que tienes”, compartió.
