Ana Brito salió de su país, República Dominicana, hace ya 45 años, cuando se encontraba embarazada de su hija Yamel Meriño Brito, a la cual dio a luz el 21 de octubre de 1976 en el hospital de Elmhurst en el condado de Queens, Nueva York.
A 22 años de la partida de su hija, quien servía como paramédico para la empresa MetroCare Ambulance al momento del atentado a las Torres Gemelas, Ana conversó con Diario Libre sobre cómo mantiene vivo el recuerdo de Yamel, que tenía 24 años cuando murió y quien no pudo ver crecer a Kevin, su hijo que, entonces, tenía ocho años.
Yamel vivía en Yonkers, a pocas cuadras de la casa de su mamá, y todas las mañanas llevaba a Kevin hasta allá para que Ana lo acompañara a la parada del bus que lo llevaba a la escuela. Pero la noche del 10 de septiembre, Yamel se quedó a cenar cuando fue a buscar a su hijo. 'Ella era de poco comer, y esa noche se sirvió un poco de macarrones blancos, se los comió y repitió otra vez. Nosotros le dijimos: 'Wao, Hay hambre'. Esa fue la última vez que la vi', dijo su madre.
La mañana del 11 de septiembre, Yamel dejó a su hijo en casa de su madre como de costumbre, pero fue su hermano quien lo recogió en la puerta. Minutos después, llamó a su madre para decirle que había olvidado darle dinero al niño para su merienda.
'Luego de eso, una señora, que vivía encima de mi casa, baja a decirme 'mira lo que está pasando', se sentía en el ambiente esa tristeza… uno estaba llorando prácticamente oyendo la noticia y la desgracia, pero uno nunca piensa que le va a tocar', dijo Ana.