El suceso ocurrió en la localidad de Villa de Don Fadrique, pequeño pueblo de unos 4.000 habitantes en la provincia de Toledo (centro).
Según explicaron a Efe fuentes del servicio de emergencias regional, se recibió la llamada de un vecino diciendo que había una mujer "muy nerviosa" en las inmediaciones del cementerio y fue este vecino quien encontró al bebé muerto en el altar de la capilla del camposanto.
La mujer, después de matar a su hija, entró en la iglesia del municipio gritando que "tenía el demonio dentro" y allí fue detenida por la Guardia Civil y después trasladada al hospital de una localidad próxima.
La filicida, española de 37 años, tiene antecedentes psiquiátricos y es madre de otra niña de tres años.
Está casada con un hombre de origen sudamericano que se enteró a media mañana del suceso porque tiene un negocio de venta ambulante, según informó el alcalde del municipio, Jaime Santos.