Por. Ruben Moreta
-Permítanme, sin ser “patriota de San Juan”, por todo el veneno y sentido peyorativo de esa expresión, reiterar que la “decoración”, expreso yo, embarre de la Alcaldesa Hanoi Sánchez al Arco del Triunfo es una acción pseudo-estética, invasiva, incoherente e ilegal (porque hay una resolución interna del ayuntamiento que declara el Arco del Triunfo y su entorno Monumento Histórico en Honor a la Independencia y Restauración de la República).
Me resulta vacuo, penoso y una charlatanería este discurso de los nuevos orillos de la alcaldesa, por lo que reitero lo que he escrito sobre el embadurnamiento del monumento más representativo de este pueblo sureño:
Pseudoestética y gobierno municipal
Pseudoestética y gobierno municipal
Las ciudades del mundo poseen monumentos icónicos, que le dan identidad. París tiene a la Torre Eiffel; Nueva York tiene a la Estatua de la Libertad; Sao Paulo en Brasil tiene el Cristo Redentor o Cristo Concorvado y la Habana en Cuba posee la Plaza de la Revolución.
En República Dominicana, la ciudad de Santiago tiene el Monumento a la Restauración e Higuey su basílica altagraciana. También, a mucho orgullo, La cinco veces centenaria ciudad de San Juan de la Maguana tiene su monumento icónico: el Arco del Triunfo, erigido a finales de la primera mitad del siglo pasado para conmemorar los aportes de San Juan a la construcción de la dominicanidad y la heroicidad exhibida en la Batalla de Santomé, con la cual se contribuyó a consolidar la Independencia Nacional.
¿Alguna vez un alcalde de Nueva York ha dispuesto embarrar de pintura o con muñecos carnavalescos la estatua de la libertad?
¿O el alcalde de Paris ha embetunado la Torre Eiffel?
¿Acaso ustedes han visto pintarrajeado y con su fisonomía cambiada el Cristo Concorvado?
Pero en San Juan, en una acción absurda, se acaba de producir el embadurnamiento del más simbólico de sus monumentos, el Arco del Triunfo, y quien ha patrocinado ese “tollo” es nada más y nada menos que la gobernante del municipio, la arquitecta Hanói Sánchez Paniagua.
Increíble, pero fue la Honorable Alcaldesa quien también acaba de profanar otro monumento representativo de la ciudad: el Palacio Municipal, al embadurnar el lado Este de dicho edificio.
Solo en San Juan de la Maguana a una mandataria municipal se le ocurre profanar dos monumentos distintivos de la marca ciudad, como el Arco del Triunfo y el Palacio Municipal. Y todo por una simple pseudo estética.